Tityus falconensis

Tienen una anatomía muy compleja, con patas ventrales completas y paralelas en su primer segmento del cuerpo.

Las crías viven en el costado del lomo de su madres sin hacerle daño, esto hasta desarrollar un exoesqueleto más duro.

El veneno de Tityus falconensis es un mezcla excitativa y neurotóxica, el veneno actúa sobre las terminaciones nerviosas irradiándose por los nervios hasta las axilas o la región inguinal, siendo en los casos graves insoportable, genera ceguera, mareos, náuseas, piloerección, dolores de cabeza, problemas cardíacos, sudoración excesiva y un aumento en la presión cardiovascular.

El potencial del veneno es capaz de provocar un descenso en la presión arterial hasta que llegue a cero, también genera secreciones en las vías respiratorias obstaculizando el trabajo de los alveolos pulmonares, bloqueando las placas terminales del diafragma.

Su neurotoxina es una de las menos estudiadas en el mundo y no existe un antídoto en Venezuela, sin embargo los casos son atendidos en Brasil.

Área de protección natural donde habita Tityus falconensis .
El Parque nacional Juan Crisóstomo Falcón lugar donde habitan las comunidades más grandes del escorpión de Hueque.