El Timo de la estampita es el nombre de una tradicional estafa que se solía hacer en España a principios del siglo XX.
El personaje entablaba conversación con algún viandante, el primo, y en ese momento entraba en escena otro de los estafadores, el listo, quien proponía a la víctima hacerse con el dinero por medio del engaño.
Entonces, el incauto ofrecía al tonto una pequeña cantidad de dinero por las estampas del sobre; éste aceptaba y entregaba el sobre.
Una vez que el listo y el tonto se habían marchado, la víctima se daba cuenta de que en el sobre no había dinero, sino papeles sin valor.
[1][2] Desde su creación, este engaño y otros emparentados, como el llamado "tocomocho", se han reiterado hasta el siglo XXI.