Nacido en Croft cerca de Darlington, estudió en la Northallerton Grammar School, y después fue a Clare Hall, Cambridge en 1651.
Opuesto a Jacobo II, tras la Revolución Gloriosa, fue capellán ordinario de Guillermo III.
Además, describió la Tierra como una concha o huevo gigantesco, desde cuyo interior fluyeron las aguas del diluvio cuando Dios rompió la cáscara, cuyos restos habrían formado las montañas al fragmentarse.
[3] Su teoría fue criticada por John Keill, William Whiston y Erasmus Warren, aunque el poeta Joseph Addison le dedicó elogios.
Esto generó indignación e hizo que fuera desposeído de sus cargos reales.