La gira, con 120 conciertos en total, sirvió como promoción del álbum de estudio The Rising, fue una de las más duraderas del músico hasta la fecha, y supuso la segunda gira de Springsteen con la E Street Band tras su reunión con el grupo tres años antes.
La idea era maximizar los efectos de la publicidad sobre la gira para favorecer un incremento en las ventas del también promocionado álbum The Rising, visitando para ello diferentes mercados.
Posteriormente, volvieron a Norteamérica par tocar seis conciertos en Canadá durante el mes de abril.
Tras un nuevo descanso de tres semanas, la gira se trasladó a Europa, donde ofrecieron 24 conciertos entre mayo y junio que comenzaron en el Feyenoord Stadion de Róterdam y terminaron en el Stadio San Siro de Milán.
La etapa comenzó con diez conciertos en el Giants Stadium de Nueva Jersey.