Hizo las divisiones inferiores en Huracán de Parque Patricios, hasta que en 1990 debutó en Primera.
El Santo pasaba en la Primera B Nacional una delicada situación con el descenso, algo que finalmente Teté no pudo evitar.
Nuevamente en esta categoría, no tuvo un buen comienzo y decidió dar un paso al costado.
A comienzos de 2007 asume en San Martín de San Juan, logrando el ascenso a la máxima categoría del fútbol argentino ese año, justamente contra Huracán, su antiguo club.
En la Primera División dirigió al elenco sanjuanino toda la temporada 2007/2008, pero no pudo mantenerse en dicha categoría.
Luego dirigió a Independiente Rivadavia, donde cosechó malos resultados y renunció antes de terminar la primera rueda.
En 2020 concreta su tercer ciclo en Instituto Atlético Central Córdoba, el cual finaliza en 2021 tras una discreta campaña.