Fue originalmente diseñado muy parecido al vecino Battery Maritime Building; un conector entre los dos terminales fue planeado pero no se llegó a construir.
[6] Poco después, durante la administración del alcalde George McClellan, la ciudad buscó construir un nuevo terminial.
[11] Los trabajos se iniciaron primero en las gradas para el ferry a Brooklyn, seguidos por las de Staten Island en 1908.
[13][14] En 1919, un incendio en la estación del tren elevado de South Ferry dañó las gradas 1 y 2.
La ciudad solicitó planos para el rediseño y recibió propuestas de siete diseñadores en 1985.
[23] El proyecto South Ferry Plaza fue cancelado en enero de 1991 debido a un decaimiento del mercado inmobiliarios.
[26] Otras propuestas incluyen las de Rafael Vinoly, Aldo Rossi, Polshek Partners, y SOM.
Este diseño también incorporaba una gran fachada electrónica mirando hacia la bahía que sería el reloj más grande del mundo.
[26] También añadió una terraza hacia el río con un adorno fotovoltaico en su pabellón,[28] un pabellón largo y sinuoso en la calle con las palabras "Staten Island Ferry" en él,[26][28] y una instalación artística llamada Slips de Dennis Adams.
Segundo, que el terminal sea construido sobre el Battery Park Underpass y tres túneles del metro de Nueva York, así que un cimiento del terminal debía ser construido 18 metros bajo tierra.
[26] Incluye acceso a la estación South Ferry-Whitehall Street del Metro de Nueva York, servido por los trenes 1, N, R, y W así como servicios de bus en la Plaza Peter Minuit.
[34] Descrito como "una elegante adición a la arquitectura de la ciudad", un escritor del Newsday lo llamó un intercambiador que es tan bello que se ha convertido en un destino por su propio derecho: con "el panorama del bajo Manhattan desde lo alto de sus escaleras, el gran ventanal enmarcando la Estatua de la Libertad, el mezzanine con vistas del puerto -- esas son razones para refugiarse ahí por un tiempo mayor que tan sólo para tomar el ferry.
"[39] Ming Fay, un artista chino de Shanghái, señala que esta obra fue "inspirada por los nativos americanos cruzando con canoas".
El describió sus objetivos con la obra de la siguiente manera: De forma paralela con la construcción del nuevo terminal, la Plaza Peter Minuit fue completamente reconfigurada para proveer fácil acomodación para peatones, buses y taxis.