Templo y exconvento de San Francisco (Tepeji del Río)
Pertenece al conjunto de edificaciones mendicantes levantadas por los franciscanos en el siglo XVI.[1] Su atrio está rodeado por muros almenados y conserva dos capillas posas y una capilla abierta, mientras que su claustro, en regular estado de conservación, está formado en sus dos niveles por arcos rebajados.[1] La construcción simula una gran fortaleza de muros gruesos apoyados en enormes contrafuertes.[6] La separación étnica entre los pobladores debe haber subsistido, pues no fue sino hasta 1627 en que se asentó en el libro de registro parroquial la primera partida bautismal en castellano y no por partida doble en lengua otomíe y náhuatl.[5] Así fue la unión de estos dos pueblos que dio origen al hoy Tepeji del Río.[11] Las puertas son vanos con cerramiento de medio punto, teniendo la fachada principal, poco arriba de la clave, una ventanilla que da luz al coro, rematando ambas fachadas en un pretil.[11] A la derecha de la fachada principal se levanta la torre, de un solo cuerpo, cuadrangular, con vanos en sus cuatro costados y una almena en cada ángulo; aloja cuatro campanas y corona el conjunto un macizo cupular que apea en un tambor octagonal.[13] Los capíteles del piso bajo recuerdan el orden jónico y los de la planta alta el dórico.