La palabra ha sido generalmente adoptada por arqueólogos y eruditos para este tipo de piezas, usadas para beber, servir pequeños alimentos o simplemente para ser exhibidas.
Las tazze se fabrican con mayor frecuencia en metal, vidrio o cerámica, pero también pueden confeccionarse con otros materiales.
[1] La etimología de la palabra taza proviene del árabe, y hace referencia a una palangana o jofaina.
[2] Aunque el significado más común de la palabra taza hace referencia a un pequeño recipiente con un asa para servir bebidas calientes como el café,[3] también se utiliza para designar ciertas piezas artísticas destinadas a presentar alimentos, como la famosa taza Farnesio.
La forma y el nombre a veces designan objetos esculpidos muy grandes, especialmente los que se usan como fuentes.