Su estudio comprende el conocimiento de los colores, símbolos y los rasgos.
[1] Las imágenes representadas son las del antiguo Egipto fácilmente reconocibles por quien tenga un conocimiento básico acerca de dicha civilización.
La parte superior corresponde a una divinidad egipcia, con un componente más mental y espiritual.
La parte inferior hace referencia a un símbolo que ayuda completar el significado de la carta.
Cada uno de los arcanos incluye dos valores en clave: uno espiritual y otro adivinatorio.
Incluye la letra hebrea correspondiente a la sabiduría de la Kabala e información astrológica.
Este regalo fue contenido en una caja y arrojado al fondo del río Nilo.
En ese libro se condensaba todo el Universo, los animales, civilizaciones, el mundo material, intelectual y espiritual, lo divino, lo humano, el cosmos.
Antoine Court de Gebelin, lingüista francés, clérigo y estudioso del Tarot, creía que el nacimiento de las cartas se remonta al Antiguo Egipto.
Los Arcanos Menores tienen cada uno su propio nombre, y representan escenas de la vida cotidiana del hombre.