Desierto del Teneré

Sorprendentemente, en 1973, un camión libio la derribó y fue reemplazada por una escultura metálica, depositándose el original en el Museo Nacional de Níger.

Al igual que el Sahara, como un todo más complejo, el ahora conocido como desierto del Teneré ha variado su clima a grandes saltos desde la prehistoria hasta nuestros días.

Así como a Europa se le conocen al menos cuatro eras glaciares, estas parecen coincidir con periodos húmedos en las latitudes que ahora comprende el Sahara.

Sus bordes estaban habitados por pueblos pescadores cuyos utensilios pueden encontrarse hoy en la superficie en la medida en que eran de piedra o hueso: arpones, ganchos, puntas espinosas.

Hace entre 10 000 y 8.000 años vivió en esta región la cultura kiffian, cuyos restos más antiguos se encontraron en Gobero.

Las precipitaciones, cuyo promedio anual es inferior a los 25 mm, dependen de la penetración del monzón.

Numerosos indicadores han permitido reconstruir el clima del Holoceno al oeste del desierto, y se ha comprobado que donde actualmente la cobertura vegetal es inexistente, había sabanas de hierbas, matorrales, algunas especies arbóreas y lagos que permanecían todo el año.

Vista aérea de la zona del yacimiento arqueológico de Gobero