Hasta entonces la máxima categoría del fútbol femenino en España se denominaba División de Honor.
Se proclamó campeón el Levante Unión Deportiva por tercera vez en su historia.
Al ser la primera edición de la Superliga el Levante U. D. obtuvo el trofeo en propiedad.
En esta primera edición la disputaron 11 equipos, que jugaron todos contra todos a doble partido (un partido en el campo de cada equipo), según un calendario previamente establecido por sorteo.
Los equipos puntúan en función de sus resultados: tres puntos por partido ganado, uno por el empate y ninguno por las derrotas.