En 1992 el Híspalis crea el equipo femenino, que poco a poco fue creciendo hasta llegar a la máxima categoría del fútbol femenino y convertirse en el equipo más representativo del club.
En el año 2004 el Sevilla Fútbol Club adquiere el equipo femenino del C. D. Híspalis, pasando este a utilizar los colores, distintivos y nombre así como entrenar y disputar sus partidos como local en la ciudad deportiva del Sevilla Fútbol Club.
De este modo el Sevilla Femenino (oficialmente C. D. Híspalis) compitió durante cuatro temporadas en la Superliga.
Entonces el Sevilla Fútbol Club se desvincula del C. D. Híspalis y crea un nuevo equipo femenino, ya dentro de la estructura del club, que empieza a competir desde la categoría más baja, la Provincial.
En la temporada 2011/12, el equipo cuajó una gran actuación en la Segunda División Femenina de España, y acabó ascendiendo de nuevo a la máxima categoría del fútbol femenino español.