La sociedad se constituyó en 1923 cuando los hermanos Manuel Busquets y Joan Busquets,[4] junto al abogado Amadeu Hurtado, adquirieron el "trust" periodístico Sociedad Editorial de España.
El administrador, Antonio Sacristán Zavala,[7] fue el impulsor del acuerdo y años más tarde se convirtió también en accionista.
[9] La Sociedad Editora Universal fue un grupo editorial de gran éxito durante sus años de actividad, especialmente en la etapa republicana, cuando repartía dividendos del 11% del capital a sus accionistas y emprendía fuertes inversiones en maquinaria, como la rotativa Wifag encargada en Suiza en 1936.
[10] Esto supuso que la empresa fuera económicamente rentable, a diferencia de algunos de sus rivales como La Papelera Española,[11] y permitiera acometer —entre 1934 y 1936— una fuerte expansión del capital social, que aumentó desde 1,8 millones de pesetas hasta los 5 millones.
Las publicaciones que quedaron en zona republicana continuaron editándose bajo la gestión de comités obreros.