Era miembro de los Assemani, una familia maronita de origen libanés de la que salieron varios orientalistas ilustres y eclesiásticos.
Estudió teología en la Universidad de La Sapienza de Roma y se ordenó sacerdote de rito latino y maronita.
A la edad de 26 años se trasladó a Siria y Egipto como misionero.
Se trasladó también a Alemania y Austria y trabajó durante algún tiempo en la Biblioteca imperial de Viena.
En 1785 fue nombrado profesor de Lenguas orientales bíblicas en el seminario de Padua; en 1807 obtuvo la misma cátedra en la Universidad de Padua, ciudad en la que murió el 7 de abril de 1821.