Simbiogénesis

[3]​ Sin embargo, la comunidad científica acepta que la novedad y diversidad biológica sí surge como consecuencia de mutaciones aleatorias (errores en la replicación del ADN) formuladas desde la síntesis, no considerando a la simbiogénesis salvo en el caso concreto del paso de procariotas a eucariotas (eucariogénesis).[4]​ Desde finales del siglo XIX para la escuela rusa (Konstantin Merezhkousky, Andrey Faminstyn y Boris Mijailovich Kozo-Polyansky[5]​ "La simbiogénesis era considerada como crucial para la generación de novedad biológica".[6]​ En Francia, el biólogo Paul Portier, en 1918, e Ivan Wallin en Estados Unidos en 1927, llegaron a las mismas conclusiones.[10]​ Según Lynn Margulis, en los procesos simbiogenéticos "los términos de “coste” y “beneficio" no resultan demasiado útiles".En este periodo, plausiblemente largo, no podría hablarse de beneficio mutuo, por el contrario puede entenderse que el hospedador, infectado, deberá arrastrar durante ese primer periodo los inconvenientes de la infección, "en cualquier momento esas asociaciones pueden disolverse, sus miembros pueden cambiar e incluso destruirse entre sí, o simplemente perder a su simbionte”.[12]​ La explicación de estos procesos simbiogenéticos seguiría estos pasos: en un principio, un individuo entraría en contacto con una bacteria (Margulis otorga a las bacterias una extraordinaria capacidad de adaptación y una gran capacidad de aportar soluciones adaptativas a las más diversas condiciones ambientales), en principio esa relación podría ser parasitaria,[13]​ pero con el tiempo ambos individuos podrían llegar a una relación mutualista, el hospedador encontrarían ventajas en las características y especialidades del hospedado.[15]​ Los ejemplos más notables y a la vez mejor documentados son casos de endosimbiosis.Y, en contraposición, se pertenecería a especies diferentes cuando estos individuos no son fértiles entre sí.Margulis sostiene que la especiación, al menos principalmente, es consecuencia de procesos simbigenéticos.Su número y proliferación estarían sujetos al equilibrio que debe darse en estas relaciones simbióticas.[30]​ Igualmente, La evolución del órgano de la vista podría describirse mediante procesos simbigenéticos.Cabe señalar que Margulis nunca ha cuestionado la selección natural; por el contrario, la considera necesaria para fijar las relaciones simbióticas.[43]​ También, sostuvo que numerosa documentación sobre estos casos permanecería dispersa, habiéndosele otorgado una escasa importancia.En otros casos, la novedad biológica puede se más sutil, el nuevo individuo adquiriría una nueva característica poco significativa en el conjunto de este individuo, y los organismos implicados podrían ir desde lo macroscópico a lo microscópico.
Origen simbiogenético de algas y plantas.
Liquen «Barbas de chivo».