[1] Algunos miembros más fanáticos de la asociación (tokkotai) cometieron violentos ataques contra los isseis y los japoneses-brasileños que creyeron la noticia de la derrota japonesa en la Segunda Guerra Mundial.
Se prohibieron las publicaciones impresas (periódicos, revistas) en idiomas extranjeros, a menos que fueran bilingües, por ejemplo, el japonés-portugués.
Como las publicaciones en japonés se volvieron demasiado caras, los periódicos y revistas ya no circulaban.
[4] Durante la Segunda Guerra Mundial, la comunidad brasileño-japonesa no pudo recibir noticias de Japón y no hubo prensa escrita o hablada que utilizara el idioma japonés.
Shindo Renmei no fue la primera o la única organización nacionalista creada por inmigrantes japoneses.
Según el investigador Rogério Dezem, algunos católicos japoneses (Keizo Ishihara, Margarida Watanabe y Massaru Takahashi) crearon, con la aprobación de la Iglesia Católica y las autoridades gubernamentales, un fondo de beneficencia, conocido simplemente como "Pia", para ayudar a los miembros pobres de la colonia.
Un ex coronel del ejército japonés, Junji Kikawa, participó en las actividades de la "Pia".
Junji Kikawa imprimió y distribuyó panfletos en los que aconsejaba a los agricultores japoneses-brasileños que abandonaran o destruyeran la producción de seda (utilizada en la fabricación de paracaídas) y de menta (el derivado del mentol se utilizaba para hacer más potente la nitroglicerina).
Periódicos y revistas en japonés comenzaron a hacer circular esta idea; se pusieron al aire estaciones de radio clandestinas.
Shindo Renmei elaboró listas con los nombres de los makegumi que debían morir por traicionar al emperador.
Varias pensiones japonesas acogieron a los ejecutores después de sus acciones.
Las cartas comenzaron diciendo: «Tienes un corazón sucio, así que debes lavarte la garganta.
[3] Décadas después, su hija, Aiko Higuchi, reveló detalles sobre el crimen y sus consecuencias.
La revuelta fue controlada sólo con la llegada de las tropas del ejército llamadas por el doctor Oswaldo Nunes.
[3] En 2000, Fernando Morais lanzó Corazones Sucios, un libro que cuenta la historia de la organización.
En 2012, el director Mario Jun Okuhara puso a disposición en línea y de forma gratuita el documental Yami no Ichinichi, que aborda algunos acontecimientos del conflicto entre la victoria y el terrorismo.