Desde niño mostró una fuerte inclinación deportiva a pesar de las tensiones políticas presentes en la época.
Como anécdota se cuenta que el día que ocurrió El Bogotazo, Senén se encontraba jugando un partido con un grupo de amigos, cuando un grupo de hombres armados con machetes gritando consignas atravesó la cancha, a lo que Senén y sus amigos se limitaron a esconderse y esperar para, una vez pasado el revuelo, continuar su partido.
Con afición a Millonarios, inculcada por su padre, creció escuchando las transmisiones radiales de los partidos, interesándose en la posición de portero con ídolos tales cómo Efraín "El Caimán" Sánchez, Julio "Chonto" Gaviria y el Víctor Kriscuonas.
Con apenas un año y medio como profesional, es convocado para jugar el mundial de Chile 1962.
Como una anécdota, en ese año su ídolo y el mejor arquero del mundo en esa época, Lev Yashin "La Araña Negra", le regaló sus guantes.
Para 1964 tras la grave lesión que sufrió Pablo Centurión y la renuncia de Gabriel Ochoa Uribe, Senén era el llamado a convertirse en la figura del equipo, pero rescindió en un problema disciplinario y las directivas del club llaman a Efraín "El Caimán" Sánchez como nuevo arquero, quien no solo se adueñó de la titular sino que también era el DT del equipo al mismo tiempo.