Seis poemas galegos

Seis poemas galegos es un poemario del poeta y dramaturgo español Federico García Lorca (1898–1936), una colección de seis poemas en gallego, un homenaje al paisaje y la lengua de Galicia.

Escritos entre 1932 y 1934, fueron publicados en 1935 en Santiago de Compostela por la Editorial Nós (fundada en 1927 por Ángel Casal), edición príncipe prologada por Eduardo Blanco Amor.

Lorca expresó su deseo de escribir un poema dedicado a la ciudad, pero no parece, según Gibson, que pensara todavía en hacerlo en gallego.

Escritos al mismo tiempo que las gacelas y casidas del Diván del Tamarit, los Seis poemas galegos muestran una extensión media similar y estructuras métricas parecidas, aunque sin recurrir al verso libre de su época neoyorquina.

Lorca adoptó formas métricas tradicionales, como el romance o cuartetas asonantadas, teniendo en cuenta los elementos de la tradición literaria gallega.

[1]​ García Posada dice que el orden de los poemas no es «nada gratuito» y divide los poemas en tres parejas; en los dos primeros señala «una cierta esperanza, pese a la hostil presencia de elementos oscuros; les siguen la «Cántiga do neno da tenda» y el «Noiturnio do adoescente morto», que tratan del suicidio de dos jóvenes; de los dos finales, «Canzón de cuna pra Rosalía Castro, morta» y «Danza da lúa en Santiago», señala que pese a su «significado opuesto, están enlazados claramente por una común presencia femenina».

A mi llegada a Galicia , ellas [las «fuerzas formidables» de Compostela y el paisaje] se apoderaron de mí en forma tal que también me sentí poeta de la alta hierba, de la lluvia alta y pausada. Me sentí poeta gallego, y una imperiosa necesidad de hacer versos, su cantar me obligó a estudiar a Galicia y su dialecto o idioma, para lo maravilloso es igual.

Federico García Lorca , declaraciones en Buenos Aires , octubre de 1933. [ 1 ]
Plaza de la Quintana , en Santiago de Compostela . La Plaza de la Quintana se divide en dos niveles; el nivel superior o «Quintana dos Vivos» (Quintana de los vivos), donde estuvieron las antiguas casa consistoriales hasta su traslado a la plaza de Cervantes , y el inferior, conocido como «Quintana dos Mortos» (Quintana de los muertos), que se utilizó como cementerio hasta el siglo XIX. [ 3 ]