Su nombre hace referencia a la localidad granadina de Huétor Tájar.
[1] El Señorío de Huétor Tájar fue creado en tiempos del monarca Felipe II.
A causa de los onerosos gastos de su política exterior, el monarca se vio obligado a vender señoríos con todo lo que ello conllevaba: rentas, pechos, alcabalas, etc.
[3] La historia local corrió pareja a la del Señorío hasta su desaparición.
Durante las centurias XVI a la XVIII, las crónicas no registran sucesos de importancia relacionados con el ámbito nacional, tal vez porque los señores de Huétor, que pertenecían a una de las casas nobiliarias más poderosas de España, guardaron respeto a la Corona y se adaptaron a las distintas situaciones políticas.