Scolopendra

En un clima templado, sólo crecen especies relativamente pequeñas, mientras que las especies que viven en los trópicos pueden exceder los 30 centímetros de longitud.

[2]​ Son depredadores activos que se alimentan principalmente de invertebrados terrestres, especialmente insectos y moluscos.

Algunas especies pueden depredar sobre vertebrados de pequeño tamaño, como reptiles, roedores o murciélagos.

El veneno de las especies que forman el género Scolopendra contiene compuestos tales como la serotonina, un fosfolipasa A (hemolítica), una proteína cardiotóxica y una sustancia citolisina.

Sólo dos de las especies originalmente asignadas al género siguen siéndolo en la actualidad: Scolopendra gigantea y Scolopendra morsitans; el último fue designado como especie tipo por el dictamen 454 de la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica,[2]​ invalidando la designación anterior por Pierre André Latreille, en la que eligió 'Scolopendra forficata de Linneo (en la actualidad Lithobius forficatus) como la especie tipo.