Schmaltz

El schmaltz casero de estilo judío se hace cortando la grasa en trozos pequeños y fundiéndola en una sartén a fuego bajo o moderado, normalmente con cebolla.

Como el proceso de extracción retira el agua y las proteínas, el schmaltz no se estropea fácilmente.

Puede usarse incluso para conservar carnes cocinadas si se envasan en tarros herméticos almacenados en un lugar seco y fresco, de forma parecida al confit francés.

Una versión vegetariana (y por tanto pareve) del schmaltz fue comercializada por primera vez en Sudáfrica por Debra's bajo el eslogan «Ni siquiera el pollo puede distinguirlo».

[5]​ El sabor y textura son parecidos al del auténtico schmaltz de pollo, pero el contenido en grasas saturadas es mucho menor.

Gaenseschmalz ( schmaltz de ganso).