Estuvo habitado ya durante la época romana como demuestran los restos encontrados en 1970 correspondientes a una antigua villa del siglo I a. C. Esta villa está compuesta por cinco habitaciones y contiene suelos de mosaico así como numerosos restos cerámicos.
Su proximidad con Gerona ha hecho que su historia esté muy unida a la de la capital comarcal.
Durante la Guerra de la Independencia española la villa fue saqueada por los tropas francesas.
El puente que cruzaba el río Ter fue derruido durante las guerras carlistas.
Su iglesia parroquial está dedicada a Nuestra Señora de la Misericordia y, aunque su construcción se inició en el XIX, la finalización de las mismas no se produjo hasta 1925.