Algunos sostienen que la obra estuvo originariamente destinada al prior del convento de los eremitas agustinianos del Santo Spirito en Florencia.
Se representa al santo meditando dentro de su gabinete.
No obstante, lo que en la primera obra era un humanista con un físico que recordaba a modelos de la Antigüedad clásica, en esta pequeña tabla se ha regresado a la representación convencional.
Aparecen dos bajorrelieves con forma igualmente de tondo que representan a emperadores romanos.
Podrían aludir a Arcadio y Honorio, los dos emperadores del Imperio romano dividido.