Ruger Red Label

Cuando la Browning Superposed entró al mercado en 1931, los cazadores estadounidenses rápidamente apreciaron la idea de una escopeta superpuesta.

[3]​ La Red Label fue un éxito entre los tiradores estadounidenses debido a su costo, fiabilidad y sencillez.

El tirador podía elegir el cañón que dispararía a través de un selector montado en la empuñadura.

La culata y el guardamanos son de nogal americano con acabado al aceite, teniendo ambos cuadrillados cortados a máquina.

Introducida en 1995 y producida hasta 2002, la Red Label Woodside tenía culata y guardamanos de nogal del Cáucaso, con la primera cubriendo los lados del cajón de mecanismos.

Por un costo adicional, el grabado manual de la escopeta era ofrecido por varios maestros grabadores.

[5]​ Las críticas a la Red Label incluían quejas sobre su peso, pobre balance al rastrear un blanco en vuelo, pobre encaje del metal en la madera de algunos ejemplares y bandas de ventilación sueltas.

A muchos tiradores no les gustaba el seguro automático (que podía ser desactivado en la fábrica si el propietario lo solicitaba[6]​).