[2] Cuenta con un máster en Arquitectura del paisaje por la Universidad Estatal de Nueva York en Syracuse y es especialista en Gestión del Medio Ambiente por la Universidad Politécnica de Madrid (CEPADE).
[3] Hasta su llegada al zoológico desconocía todo sobre el tití cabeciblanco (saguinus oedipus), especie endémica del norte de Colombia.
[5] Las causas de que se encuentre en peligro de extinción hay que buscarlas en la desforestación de su territorio, que le lleva a moverse por un hábitat cada vez más pequeño haciéndole más vulnerable, y la caza furtiva para su venta como mascota llevada a cabo por mafias ilegales.
[6] Su compromiso con la causa del tití cabeciblanco le valió en 2017 el Premio National Geographic Society/Buffett[7][8] al liderazgo ambiental en Latinoamérica.
Según el jurado: En 2020, con motivo del Día de la Tierra, National Geographic volvió a dar visibilidad al proyecto con un spot sobre el tití cabeciblanco en el que Rosamira Guillén resaltaba la necesidad de su conservación para proporcionar un futuro a esta especie.