Blitz, el director, desarrolló una historia mientras hacía Spellbound, un documental sobre concursos de deletreo en EE.
UU., pero un productor de HBO Films lo persuadió para que escribiera la historia basándose en su propia adolescencia cuando Blitz le contó acerca de sus experiencias como tartamudo.
Fue rodada en 30 días en Baltimore, Maryland y Trenton, New Jersey.
No fue un éxito en la taquilla, recaudando solo 756 mil dólares sobre un presupuesto de 4,5 millones, aunque fue bien recibida por la crítica.
Fue nominada al premio del jurado en Sundance y a tres Independent Spirit Awards.