Rožnov pod Radhoštěm

Junto con los castillos Helfštýn y Hukvaldy servía como protección de Moravia contra los invasores húngaros.

El balneario estuvo en auge a principios del siglo XX, y por sus cualidades se le comparaba con Davos en Suiza o Merano en Italia.

Anualmente lo visitaban unos 3000 huéspedes, entre ellos por ejemplo el padre del psicoanálisis Sigmund Freud o el biólogo Gregor Mendel.

Durante los años 1934-35 fue construida una casa de convalecencia para el presidente checoslovaco Tomáš Garrigue Masaryk en la colina Kozinec.

Hay, a su vez, una exposición permanente de los esgrafiados del pintor académico Jan Kobzáň.

Durante todo el año hay eventos culturales inspirados por el folclore, costumbres populares y oficios tradicionales.

Allí los visitantes pueden observar algunas edificaciones técnicas en funcionamiento (molino, tabla de lavar, sierra, almazara).

Al museo pertenecen también dos albergues: Libušín (quemado en 2014) y Maměnka que se encuentran en Pustevny (collado cerca de la montaña Radhošť).