Participó como voluntario desde 1865 y por cinco años en la Guerra de la Triple Alianza, organizando los servicios sanitarios.
En este último año emprendió un viaje de perfeccionamiento a Europa becado por el gobierno.
[2] En 1879 fundó junto a sus hermanos La Patria Argentina, donde publicó en folletín la novela Cristian (1880), exaltación de su romanticismo amoroso.
En La fibra salvaje Ezequiel ama a Lucía:[2] "Huye enseguida, dejándola presa de fatales presentimientos.
En el canto tercero, Ezequiel aparece convertido en monje":[2] "Allí se encuentra una noche con el marido de Lucía, vendida por aquél después de una orgía (en el canto segundo, La fuerza del destino, Lucía hizo esa confidencia a Ezequiel, en un encuentro sumamente casual).
Es la tendencia rommántica pura, la inverosimilitud más acabada, cuadros desasidos sobre fondo opaco, y las figuras, exceptuando la de Ezequiel, ni contorneadas aparecen: argumento a saltos, cuyos recursos son de trivialidad desesperante, en espíritu tan grande".