Revenga, en su ubicación actual, aparece como resultado de repoblaciones que en la Edad Media, a partir del siglo XII, se hicieron en territorios reconquistados a los árabes.
Cerca del pueblo pasaba el camino real que iba de San Ildefonso a Guadarrama, que terminó convirtiéndose en la carretera nacional 603 Segovia-San Rafael.
Hay grandes propietarios, no residentes, con los apellidos Avellaneda, Berrocal, Contreras, Alauiza, Porres, Maldonado, Ormaza, Martínez, Martín de Velasco, Baca, Entero, Plaza, López, Balbuena, García, Salvador, Garrido, Mateos, Asenjo, Bernardo y Sancho, además de los marqueses de Lozoya, Quintanar y Peñarrubias.
Su actual alcalde ha calificado la incorporación de Revenga a Segovia como "un error".
Al frente de esta Junta Vecinal hay un alcalde pedáneo, elegido democráticamente por los revenganos.
El día de Pentecostés, pasados y olvidados los rigores del invierno, los vecinos del pueblo llegan hasta aquí en alegre romería y celebran la fiesta en agradecimiento a su Virgen.
Es un templo románico, muy austero, mantenido durante siglos por el esfuerzo de sus devotos.
Consta de una sola nave, con cabecera formada por el tramo recto del presbiterio y ábside semicircular.
Toda ella está construida en una ruda mampostería hecha con piedra de la zona y enfoscada.
Algunos sillares llevan la marca de los canteros que ha permitido datarlos, según los expertos, hacia 1240.
Posteriormente esta cornisa se sustituyó por otra de ladrillo plano y teja.
Está formada por un arco de medio punto apoyado sobre capiteles y columnas.
La arquivolta exterior presenta temas individualizados en cada una de sus dovelas: motivos vegetales, animales fantásticos, una cigüeña y representaciones de oficios entre los que destaca una figura que aparece esquilando una oveja.
La puerta del lado oeste es baja y estrecha, apenas decorada por unas molduras geométricas.
Una pequeña ventana situada en la puerta nos permite asomarnos al interior de la ermita, generalmente cerrada.
Es un arco doblado que se apoya en su parte interna en grandes capiteles decorados, en perfecto estado de conservación.
Se encuentran en terrenos del Soto, a la izquierda de la carretera, tras cruzar el paso canadiense desde la N-603.
Está inclinado unos 45° con respecto al eje del río para derivar sus aguas por la margen derecha hacia un canal descubierto que las vierte a un decantador de arenas (abierto también, por lo que se puede apreciar su funcionamiento) que, a su vez, introduce el agua por una tubería enterrada, en algunos tramos ubicada en el interior de la antigua cacera romana.
También se destaca una gran roca situada en la ladera, por debajo de la cabeza, conocida como La Peña del Oso.
En la vertiente sur se encuentra el cerro conocido como Montón de Trigo.
En la actualidad se han realizado deslindes para ubicarla con exactitud, amojonándola y dotándola de paneles informativos en lugares cercanos a su recorrido en los que se explica lo más significativo sobre la historia y monumentos del lugar.
En él pueden encontrarse construcciones (búnkeres) realizadas durante la guerra civil, así como restos de metralla, que también existen en el camino que rodea al pantano.
Aunque en su mayor parte se encuentra embalsado, formando el pantano de Puente Alta, merece la pena recorrerlo en su tramo superior, a través de bellos paisajes entre los pinares.
En este tramo se encuentra la captación que da lugar a la cacera del Acueducto.
A estas cenas se añaden las comidas que con motivo del maratón fotográfico o, como invitación a los niños de Revenga, también aparecen en el programa de fiestas.