es una pintura al óleo realizada por Ramón Casas en 1890 en Barcelona y que actualmente pertenece a una colección privada.
La Vanguardia del día anterior de la inauguración consideraba Antonia España Puig y Àngels Puig España, las dos jóvenes retratadas por Casas en esta tela, eran primas del pintor.
Al parecer, el título que en aquel momento se dio a esta obra, Retrato de las señoritas N.N., se debió a que las jóvenes prefirieron mantenerse en un discreto anonimato.
Las dos figuras destacan tanto por la precisión casi fotográfica de sus rostros como, y muy especialmente, por la valiente utilización del intenso blanco de los vestidos, matizados en rosa y azul respectivamente, colores que con mayor intensidad se aplican a los lazos que lucen las retratadas.
Asimismo el artista integró a las figuras en un exuberante entorno ocupado por unos grandes maceteros con plantas y flores que no sólo logran un ajustado contrapunto en las retratadas sino que permiten al artista mostrar su extraordinaria habilidad.