Retrato de Francesco Giamberti

El retrato de Francesco Giamberti es un cuadro del pintor italiano Piero di Cosimo, realizado en torno a 1485, que se encuentra en el Rijksmuseum de Ámsterdam.

Fue legnaioulo, tallador de mobiliario (incluso para los Médici, para quien compuso música, por lo que en la base se representa una partitura con notas pneumáticas) y probablemente también estuvo al servicio de Cosme el Viejo, así como del papado.

En 1485 su hijo Giuliano encargó a Piero di Cosimo un famoso retrato doble de sí mismo y de su padre, quien para esa fecha ya estaba muerto, para lo que usó probablemente una máscara mortuoria.

En la obra se percibe la tendencia al realismo propio del autor, manifestada por ejemplo en la prominencia de la vena en la sien[1]​ del retratado o su oreja doblada por la acción del gorro, lo que aleja la figura del idealismo que se daba en otros pintores de la época.

Los pequeños detalles anecdóticos en los laterales de la obra reflejan la influencia del pintor Hugo van der Goes.