Reparación directa

La reparación o inversión directa del ADN es un sistema de reparación que NO requiere eliminación de nucleótidos o bases nitrogenadas, y que emplea enzimas para reparar directamente alteraciones nucleotídicas.

Los principales enzimas empleados son la fotoliasa (separa los dímeros de timinas formados por radiación UV) y la metiltransferasa (retira grupos metilo añadidos al ADN).

Se sabe que las células eliminan tres tipos de daños en el ADN invirtiéndolos químicamente.

Estos mecanismos no requieren una plantilla, ya que los tipos de daños que reparan sólo pueden tener lugar en una de las cuatro bases.

Se trata de un proceso exigente en recursos, pues cada molécula de MGMT sólo se puede utilizar una vez, es decir, la reacción es estequiométrica y no catalítica.