Sin embargo, la alianza anglo-francesa pudo hacer o hizo poco para ayudar a Polonia.
El Frente Oriental entre la Unión Soviética y la Alemania nazi se convirtió en el mayor teatro de guerra jamás visto.
En el teatro del sudeste asiático, la Flota Oriental británica llevó a cabo ataques en el océano Índico.
La Flota Británica del Pacífico participó en la Batalla de Okinawa y en los ataques navales finales contra Japón.
Luego de estar meses sin combates, Alemania sigue su expansión invadiendo Noruega y Dinamarca.
El Reino Unido envió tropas a Europa Occidental cuando los alemanes invadieron Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos y Francia en mayo de 1940.
Las tropas británicas, junto a las francesas, son acorraladas y retroceden hacia el norte de Francia.
Los alemanes ya habían ocupado Francia, pero aún quedaban muchos soldados británicos y franceses en el territorio.
Para poder invadir Gran Bretaña, los alemanes debían previamente atacar las instalaciones militares importantes de los británicos.
En primera instancia, la Luftwaffe (fuerza aérea alemana) concentró su poder en Londres, la capital del Reino Unido.
Los alemanes no conseguían hacer desistir a los británicos, que cada vez tenían mayor poder.
Finalmente, las tropas del Reino de Grecia se rinden y su capital Atenas es ocupada.
Grecia, en tanto, es dividida en tres zonas de ocupación repartidas entre Alemania, Italia y Bulgaria.
Aprovechando el mal momento del Reino Unido debido a los bombardeos alemanes, los italianos decidieron lanzar ofensivas en África para tener el control de la zona.
Cabe destacar que años antes, en 1935, Italia invadió Etiopía y la Somalia británica sin previa declaración de guerra.
En el África Ecuatorial Francesa, los británicos logran una victoria aplastante, pero en Dakar, pierden y son obligados a retirarse.
Durante meses se libra una gigantesca batalla en el desierto entre ingleses e italianos, costando numerosas bajas para ambos bandos.
La situación del Reino Unido se vio gravemente dañada en el océano Pacífico debido al violento y rápido expansionismo de Japón.
El Imperio de Japón, que se había aliado con Alemania e Italia, deseaba tener un gran imperio en el Pacífico y Asia, pero para eso debió invadir y atacar Territorios Británicos de Ultramar.
Más tarde, en febrero de 1942, los japoneses entran en la gran fortaleza del Imperio Británico en el Pacífico: Singapur.
Desde un comienzo, el océano Atlántico fue un escenario de combates para el Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial.
Todo el Atlántico se volvió un lugar peligroso e infestado por estos submarinos destructores, incluso en las cercanías de Sudamérica, Alemania había hundido acorazados británicos que se encontraban cerca de Uruguay, punta del este.
En diciembre de 1942, tuvo lugar una decisiva batalla importante entre la Royal Navy y la Armada Alemana.
El nuevo gobierno italiano va a iniciar enseguida conversaciones para una paz con los Aliados que culminarán el 3 de septiembre cuando el Reino de Italia firme la rendición, habiendo sido mantenidas en secreto para no alertar a Hitler.
Mientras, los Aliados redirigen sus esfuerzos hacia Nápoles, haciendo retroceder lentamente a los alemanes del sur de Italia.
Se había desvanecido cualquier esperanza que tuviesen los alemanes de contener el avance aliado en Francia, formando una nueva línea defensiva.
Las fuerzas alemanas se retiraron hacia otros puntos de Francia, Países Bajos y Bélgica.
La liberación de Francia dio paso a que las tropas aliadas siguiera su avance, pero esto se vio retrasado momentáneamente por una ofensiva alemana en las Ardenas.
El Reino Unido había propuesto los bombardeos sobre Alemania en 1941, pero los ataques aéreos se efectuaron a partir de 1942.
En los siguientes años, los bombardeos siguieron sistemáticamente por las demás ciudades alemanas, como Duisburg, Düsseldorf, Brunswick, Lübeck, Rostock, Bremen, Kiel, Hannover, Fráncfort del Meno, Mannheim, Stuttgart, y Schweinfurt, en donde los bombardeos mataron a miles de personas, además de dejar a muchas edificaciones completamente destruidas.