La rejilla del Rasterschlüssel 44 se componía de 600 celdas, organizadas en 25 columnas y 24 filas.
Cada celda y cada fila estaban identificadas por un par de letras dispuestas aleatoriamente.
Estas letras eran cualquier par que se pudiera hacer con los cinco primeros caracteres del alfabeto.
[2] Para cifrar, se escogía al azar una línea y una columna y se introducía la primera letra del mensaje en la celda en blanco correspondiente (si no era una celda en blanco, en la primera que hubiera a la derecha).
Antes de proceder a escribir el mensaje en la rejilla, los nombres propios (que podrían ser identificados) eran cifrados por una sustitución simple.