Charles Raoul Verlet (Angulema, 1857-Cannes, 1923) fue un escultor francés.
Sus primeros trabajos fueron muy populares entre el público, dos lápidas funerarias en el salón le reportaron una mención y el monumento a los niños muertos en Charente en 1870 le dio prestigio, y le sustentó en la obtención de un encargo para una escultura que conmemora el sacrificio de niños en el Indre la ciudad instalada en Chateauroux.
[2] En esa década realizó asimismo los monumentos dedicados a Antonio José de Sucre y Manuel Murillo Toro.
Fue autor de numerosas obras en Francia y en otros países del mundo.
Entre sus mejores y más conocidas obras se incluyen las siguientes: