Raimundo Lanas

Comenzó a cantar muy joven en su localidad natal, y, posteriormente, en los pueblos de cercanos: Tudela, Carcastillo, Villafranca.

Más tarde, se trasladó a Pamplona, iniciándose en la música en "Los Amigos del Arte" y en el "Orfeón Pamplonés", cuyo director, Remigio Múgica, le alentó.

En Pamplona conoció el guitarrista Miguel Cenoz, de Ostiz, que fue su acompañante y amigo.

Trabajó en grandes compañías de espectáculos, con J. Guerrero y Raquel Meller, mereció el sobrenombre artístico de "El ruiseñor navarro" (1933) y cosechó éxitos en Cuba, México cuando llegó a México fue recibido por el industrial Navarro Martín Oyamburu Arce quien era dueño de La Modelo y la Goodrich Euzkadi prestándole las instalaciones de la Cervecería para dar recitales y financiando las presentaciones en Bellas Artes.

Luis Gil Gómez escribió que su voz "timbrada y fuerte" servía "sin barroquismos estériles ni atildamientos" a la "lírica de los cancioneros populares".