Quintín de Torre

[1]​Su padre fue el también artista y pintor Tirso de la Torre.

Posteriormente también sería aprendiz en el taller de Serafín Basterra.

El Ayuntamiento de Bilbao le becaría para ampliar sus estudios en Barcelona.

En 1901 se trasladaría a París, donde se reencontró con Paco Durrio y conoció el legado de Rodin o Constantin Meunier.

[5]​ Cultivó diversos géneros, como el retrato, la escultura funeraria y la religiosa.