[1] Seguidamente se incorporan los huevos, batidos.
A continuación se añade la harina.
Una vez amasado se deposita en moldes de tarta, que se introducen en el horno durante una hora a 180 °C, hasta que se dore su superficie.
Se puede servir caliente o frío.
Tiene la consistencia del pudin y es de sabor ligeramente dulce.