Quercus incana

[1]​ El tronco es corto y las ramas torcidas forman una copa irregular abierta.Se adapta muy bien a los incendios forestales y crece en el hábitat donde el fuego es común y a menudo se requiere, tales como ecosistemas de pino de hoja larga.[1]​ La madera de este roble es dura y fuerte, pero los árboles son generalmente demasiado pequeños para ser buenos para ningún uso, salvo el combustible o postes.[1]​ Quercus incana fue descrita por William Bartram y publicado en Travels Through North and South Carolina 378, 403.[3]​ Quercus: nombre genérico del latín que designaba igualmente al roble y a la encina.
Ilustración de la bellota