Quebrada (tango)

En lenguaje tanguero, la quebrada es un "firulete", es decir un adorno coreográfico para lucimiento del baile.

Algunos estilos de baile, genéricamente definidos como tango liso, atenúan el corte y la quebrada e incluso llegan a eliminarlos, con el fin de evitar el contacto sensual que el movimiento implica.

Prohibidas las marchas, el baile afro-rioplatense se encerró en sitios de baile que tomaron el nombre de academias, milongas, pringundines o canguelas, que atrajeron a un tipo social popular conocido como "compadrito", sucesor del gaucho en su proceso de urbanización.

La quebrada, al igual que el corte, comenzó entonces a ser atenuada, cuando no eliminada, con el fin de "adecentar" la danza.

[1]​ En la coreografía milonguera tradicional del tango, el corte y los firuletes corresponden a los momentos melódicos del tema, en los que el compás se encuentra menos marcado, debiendo finalizar y caminarse cuando el tema vuelve al compás marcado.

Ejemplo de corte con quebrada.