Levantada en el siglo XVIII por Torcuato Cayón, la portada está labrada en mármol y está concebida más como retablo religioso que como fortificación militar.[1] Es uno de los monumentos más significativos de la ciudad y separa en la actualidad, el Casco Antiguo (conocido popularmente como "Cádiz" o "Cádiz Cádiz") y la zona moderna (conocida popularmente como "Puerta Tierra" o "Extramuros") de la ciudad.Concebida más como retablo religioso que como fortificación militar, fue ejecutada bajo la dirección de Torcuato Cayón.No tiene el típico diseño de las torres ópticas del brigadier Mathé (como Torrechica, en San Fernando).En la primera mitad del siglo XX, ante el crecimiento de la ciudad por las áreas extramuros, se barajó la posibilidad de demoler todo el conjunto y permitir un mayor acceso a los vehículos al centro de la ciudad.