La formación de esta estructura aberrante es el primer paso del denominado ciclo de ruptura-fusión-puente.
La ruptura del puente iniciará un proceso que podrá generar fenómenos de amplificación génica a lo largo de varias generaciones.
Los ciclos de ruptura-fusión-puente son una fuente importante de inestabilidad genómica.
Las alteraciones genéticas producidas por los ciclos de ruptura-fusión-puente están presentes en los genomas tumorales acompañadas de cromotripsis.
Los puentes cromosómicos se pueden visualizar mediante tinción con agentes como el DAPI o mediante proteínas fluorescentes como la green fluorescent protein-barrier-to-autointegration factor (GFP-BAF).