Al ser el segundo puente urbano construido en la ciudad de Murcia sobre el río, fue llamado Puente Nuevo para diferenciarlo del puente Viejo, a pesar de que hoy día es el segundo más antiguo de la ciudad.
El proyecto fue presentado personalmente por su autor, Manuel Serrano, “arquitecto director de Caminos”.
[2] Los tramos de acceso, incluido el que pasaba sobre los antiguos jardines de Ruiz Hidalgo, desaparecieron con la nueva canalización del río Segura realizada a finales de los años 50 del siglo XX, que redujeron notablemente la amplitud del cauce, quedando únicamente a la vista el tramo central con las vigas parabólicas.
En marzo de 2001, el puente fue cerrado al tráfico por motivos estructurales.
El Ayuntamiento de Murcia decidió su restauración intentando conservar al máximo la estructura original, lo que supuso su transformación en puente exclusivamente peatonal debido a que el puente original no fue diseñado para las cargas de tráfico que exige la normativa vigente (IAP-98).