Similar en aspecto y estructura al ñandú común (Rhea americana), algunos estudios han indicado que debe incluirse en el género Pterocnemia y recuperar así la antigua clasificación de George Gray.[7] corre más rápido que la Rhea americana pero con menor resistencia, lo hace con el cuello en posición horizontal con las alas pegadas al cuerpo, alcanzando velocidades de hasta 60 km/h.Su coloración es gris pardo a castaño con moteado blanco, las crías nacen con un color blanco amarillento y adquieren el moteado de los adultos al año, son maduros a los dos años de edad.La mayoría de los huevos son pasados al nido por el macho, algunos permanecen afuera, dónde se pudren y atraen las moscas al ser rotos por el padre cuando nacen los polluelos, para que coman las moscas.Esta calificación internacional implica catalogar al ñandú como especie amenazada o vulnerable y sugiere adoptar una legislación muy estricta para revertir la situación actual.[cita requerida] Lo mismo ocurrió años atrás en la Granja Tupalá en Puno, donde perecieron 20 ejemplares.