[12] En momentos puntuales también estuvieron presentes algunas agendas difusas, generalmente llevadas por personas ajenas a los movimientos sociales e influenciadas por oligopolios comunicacionales, como la oposición al Pec 37, pero fueron minoritarias.
Al día siguiente, 30 de agosto también hubo manifestaciones pero aquella vez no se produjeron enfrentamientos con la policía.
[21] Se estima que unos 250 000 manifestantes salieron a las calles el lunes 17 de junio en varias ciudades.
[22] Aunque las protestas han sido pacíficas,[cita requerida] la invasión de la Cámara Legislativa del Estado es un hecho que ha dejado varias personas heridas por disparos al parecer por las fuerzas policiales, mientras que otras diez personas fueron hospitalizadas.
[27] Durante el desarrollo de las protestas se tomaron medidas para proteger los principales edificios del gobierno en las principales ciudades como la capital federal Brasilia, São Paulo, Río de Janeiro, Recife, Porto Alegre, Manaus y Belo Horizonte entre otros.
La presidenta Dilma Rousseff, se reunió con alcaldes y gobernadores de los 26 estados y el distrito federal, para levantar soluciones para el problema en Brasil, donde lo más aplaudido entre las personas es la inclusión del plebiscito para la reforma política del país, lo que luego ya fue contestado por la oposición[29] y que, hasta el momento, no ha cuajado en actuaciones concretas, por lo que han continuado las protestas.