Poseía fuertes músculos en la mandíbula y en el cuello, lo que le permitiría atacar a animales tan grandes como Lystrosaurus.
Entra sus presas estaban los reptiles y sinápsidos de tamaño pequeño o mediano.
Se cree que Proterosuchus, como los actuales cocodrilos, era un depredador de emboscada, esperando por sus presas cuando llegaban al agua, hasta el punto en el que podrían ser atacadas desde debajo de la superficie, usando su larga cola musculosa para nadar e impulsarse a través del agua con gran velocidad.
Sin embargo, el animal también poseía patas robustas que le permitían caminar cómodamente en tierra.
Cuando se acercaban lo suficiente, Proterosuchus podría saltar y arrastrar a su víctima en el agua, ahogándola para luego comerla.
Las comparaciones entre los anillos escleróticos de Proterosuchus y las aves y reptiles modernos indican que puede haber sido catemeral, activo durante el día durante intervalos cortos, apoyando la idea de que los primeros arcosaurios estaban adaptados a la luz tenue.
Proterosuchus es un ejemplo de arcosaurio primitivo, el grupo que incluye a los cocodrilos, pterosaurios, dinosaurios y aves.
También aparece un individuo intentando devorar a un Euparkeria, aunque al final este se convierte en un Allosaurus.