Proceso de Verona

Ante ello, Hitler dispuso que las fuerzas armadas alemanas invadieran Italia y desarmaran a su ejército, después liberasen a Mussolini, y pusieran al Duce al frente de un gobierno títere expresamente creado por los alemanes: la República Social Italiana (RSI), concebida como un régimen completamente subordinado a la Alemania nazi como un simple satélite.

Los otros 13 se hallaban en territorio italiano dominado por los Aliados occidentales o escondidos, y fueron juzgados en rebeldía.

Así, antes que empezara el proceso, los líderes del nazismo alemán habían exigido a Mussolini dar muerte a los "traidores del 25 de julio", advirtiendo que desaprobarían cualquier otro veredicto.

El resto de los acusados fue condenado a muerte sin discrepancias reseñables al respecto en el seno del tribunal.

Ninguno fue capturado por las autoridades de la RSI, y todos sobrevivieron a la guerra.

Los acusados de izquierda a derecha: Emilio De Bono (con las manos en la cara), Carlo Pareschi , Galeazzo Ciano , Luciano Gottardi , Giovanni Marinelli y Tullio Cianetti .
Andrea Fortunato, fiscal del juicio.
El pelotón de fusilamiento .
Los condenados esperando su ejecución (Ciano segundo a la derecha).