Reafirma la importancia fundamental de que la gente elija voluntariamente asumir un compromiso con sus cooperativas.
En estos casos, las cooperativas tienen la especial responsabilidad de asegurar que todos los asociados estén plenamente comprometidos de manera que lleguen a apoyar a sus cooperativas en forma voluntaria.
La misma oración continúa refiriéndose a la manera en que la cooperativa admite asociados.
El principio referido a los asociados prohíbe asimismo la discriminación basada en características "sociales".
Por ejemplo, algunas personas que no están familiarizadas con la posición filosófica del movimiento cooperativo, podrían llegar a la conclusión de que es aceptable excluir a gente por motivos raciales.
Quizá cuando se haga la próxima revisión de los principios, esta referencia pueda ser suprimida.
Las cooperativas también deberían estar abiertas a todas las personas, independientemente de su afiliación política.
En este sentido, ha intentado trascender a las ideologías tradicionales que han creado tantas tensiones, desasosiego y guerras a finales del siglo XIX y en el siglo XX.
Existen algunas, en su mayoría cooperativas financieras, que son organizadas por iglesias y comunidades religiosas.