Se negó a asistir al Concilio Ecuménico de Constantinopla en ausencia del Papa y fue el único africano en firmar la Constitución papal dirigida a Justiniano, aplastada sin pena ni gloria junto con su líder.
El trabajo de Ticonio fue considerado por Primasio una pieza valiosa que solo esperaba ser revisada y expurgada.
Ticonio había desarrollado la teoría, creada por Victorino, de examinar las distintas palabras e imágenes utilizadas en diferentes pasajes para transmitir el mismo mensaje.
Este mismo monasterio, según un catálogo manuscrito, poseía una obra Contra haereticos que ya no existe y alude a otras obras, en especial uno sobre Jeroboam.
El Comentario sobre las epístolas paulinas y sobre los hebreos atribuido a Primasio por Jacques Paul Migne es espurio.