Deseando afianzar su teología consagra durante seis meses quince horas de estudio por día.
Ampliando el debate, trata sobre cuestiones importantes del derecho eclesiástico, y de las relaciones con la autoridad secular.
Allí se suceden con rapidez numerosos trabajos religiosos pensados para el clero bajo, a precios accesibles que aseguran amplia circulación.
Las más conocidas son: Scripturae sacrae cursus completus, que ensambla un amplio repertorio de comentarios sobre cada libro de la Biblia y Theologiae cursus, cada uno en 28 volúmenes, entre 1840 y 1845; luego Collection des auteurs sacrés (100 vols., 1846-8); Encyclopédie théologique (171 vols., 1844-6).
Finalmente, tocado por la franqueza de su editor y por la molestia que su decisión podía acarrear entre la autoridad eclesiástica, levanta la condena.
Desde Roma, del universo católico, afluirán felicitaciones de obispos, cardenales y laicos instruidos.
Esta será una Biblioteca universal de la Iglesia Católica: 850 volúmenes ya vieron la luz.
En 1846 fundó la Voix de la Vérité, con ayuda del P. Clavel y un jurisconsulto eminente, el P. Romaiu Prompsault.
Este segundo intento fue reemplazado en los proyectos de Migne por un tercero: la Voix canonique, liturgique, historique, bibliographique, anecdotique.
Editor Migne abandonó la dirección del l'Univers religieux para zambullirse en una empresa mucho más ambiciosa.
También estableció un sistema de correctores y revisores que disminuían notablemente los errores finales.
Es difícil hacerse una idea del orden exacto, e incluso algunas colecciones salieron de la imprenta en forma simultánea.
Las principales colecciones Desde 1838 hasta 1840 aparece el curso completo de Sagrada Escritura: Scripturae sacrae cursus completus, ex commeniariis omnium perfectissimis ubique habitis, et a magna parte episcoporum necnon theologorum Europae catholicae universim ad hoc interrogatorum designatis, unice conflatus; plurimis annotantibus presbyteris ad docendos levitas, pascendosve populos alte positis, annotavit vero simul el edidit J. P. M.<7cite> Inmediatamente después del curso completo de Sagrada escritura, JPM publica la Theologiae cursus completus… Las obras fueron impresas con el texto en latín, sin la traducción francesa, en orden metódico, sin ninguna preocupación cronológica.
También podemos poner en esta lista a las Démonstrations évangéliques des plus célèbres défenseurs du christianisme, traduites pour la plupart des diverses langues dans lesquelles elles avaient été écrites, reproduites intégralement, non par extraits, annotées et publiées par l'abbé Migne, más un volumen de introducción y uno de conclusión.
El propósito del editor era reunir algunas fuentes que resultaran útiles al momento de defender la religión.
Algunos autores, bien elegidos, habrían permitido seguir todos los progresos de la polémica cristiana intermedia.
La primera serie comprende 66 volúmenes: Collection intégrale et universelle des Orateurs sacres du premier et du second ordre, et collection intégrale on choisie de ceux du troisième ordre, publiés selon l'ordre chronologique, a fin de présenter, comme sous un coup d'oeil, l'histoire de la prédication en France, pendant plus de trois siècles, avec ses commencements, ses progrès, son apogée, sa décadence, et sa renaissance.
Para ilustrar estas colecciones relativas a la ciencia religiosa, Migne hizo entrar en sus publicaciones un Cours complet d'histoire ecclésiastique, en 27 volúmenes.
Para lograr este objetivo reunirá una primera colección de escribanos latinos y, en una segunda, escritores griegos.
El plan adoptado por Migne se justifica muy bien: es el que se adopta actualmente para las publicaciones patrísticas de Berlín y de Vienne, la primera consagrada a los escritores griegos, la segunda a los latinos.
La puesta en marcha Para lograr llevar a cabo esta empresa Migne necesita de colaboradores.
El editor no se frena frente a estos sacrificios en su intento de alcanzar una perfección tipográfica tan alta como le sea posible.
En él enumera con gusto las cualidades de la publicación: Patrologiae cursus completus, sive Bibliotheca universalis integra, uniformis, commoda, aeonomica, omnium SS. Patrum, doctorum, scriptorumque ecclesiasticorum qui ab aevo apostólico ad Innocentii III témpora floruerunt; recusio chronologica omnium quas exstitere monumentorum catholicae Traditionis per duodecim priora Ecclesiae saecula, juxta editiones accuratissimas, ínter se cumque nonnullis codicibus manuscriptis callatas, perquam diligenler castigata; dissertalionibus, commentariis lectionibusque variantibus continenler illustrata; ómnibus operibus post amplissimas editiones quae tribus novissimis saeculis debentur absolutas delectis, aucta; indicibus particularibus analylicis, singulos sive tomos, sive auctores alicujus momenli subsequentibus, donata; capitulis intra ipsum textum rite dispositis, necnon el titulis singularum paginum marginem superiorem distinguentibus subjectamque materiam significantibus, adornata; operibus cum dubiis tum apocryphis, aliqua vero auctoritale in ordine ad Traditionem ecclesiasticam pollentibus, amplificata...; editio accuralissima, caeterisque ómnibus facile anteponenda, si perpendantur: characterum nitiditas, charlae qualitas, integritas textus, perfectio correctionis, operum recusorum tum varietas, tum numerus, forma voluminum perquam commoda sibique in toto operis decursu constanter, similis, pretii exiguitas, praesertimque ista collectio, una, methodica et chronologica, sexcentorum fragmentorum opusculorumque hactenus hic illic sparsorum, primum autem in nostra Bibliotheca, ex operibus ad omnes artates, locos, linguas formasque pertinentibus, coadunatorum.
Este volumen había sido compuesto y preparado para la impresión cuando sucedió el incendio de 1868.
Muchas obras, cuyos manuscritos habían sido conservados, pudieron ser retomadas y terminadas.
De la misma manera se esfumaron los sueños que Migne atesoraba para otras colecciones.
El producto de esta venta hubiera permitido a Migne comenzar inmediatamente sus nuevas colecciones.
Es importante rescatar, sin embargo, que a pesar del incendio la obra de Migne no desaparece.
Ella termina l'Histoire ecclésiastique, los Orateurs sacres, edita unas Tables a la Patrologie grecque y reedita las obras agotadas.
Es un hecho que esta prodigiosa publicación es una obra de inmensa utilidad considerada en su conjunto.